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Smart Cities: Revolución, oportunidad o moda

El pasado martes tuvimos la oportunidad de realizar esta presentación en la Universidad Autónoma de Manizales, aprovechando para dar las gracias a Sandra Hurtado por la invitación. Esta presentación ya se encuentra en el Slideshare de Verlaciudad y el texto a continuación es una descripción de lo que se trata.

Smart Cities: Revolución, oportunidad o moda

Cuando hablamos de Smart Cities, hablamos principalmente de Cómo usamos la tecnología para mejorar la calidad de los ciudadanos. Si bien las TIC son importantes, es muy importante entender que es más acerca de las personas que de tecnología, porque la tecnología no es una solución, es un medio.

¿Qué es lo que queremos resolver?

  • ¿Queremos mejorar la eficiencia de los servicios públicos?
  • ¿Queremos mejorar la movilidad?
  • ¿Queremos que las ciudades sean seguras?
  • ¿Queremos que las ciudades sean ambientalmente sostenibles?

La respuesta es Sí. Son necesidades que ya teníamos y seguimos teniendo. La tecnología y el conocimiento también lo teníamos. ¿Entonces qué es lo que hace a una ciudad Inteligente? ¿Qué es lo que nos trajo hasta este punto en donde estamos?

Vamos desde el principio. Miremos el papel de la tecnología en el desarrollo de las ciudades: El Fuego y la Rueda son desde luego, tecnologías, porque la Tecnología es el conjunto de instrucciones aplicadas a un proceso productivo, o sea que de entrada, ya estamos hablando del uso de la tecnología para mejorar la calidad de vida. Sin el Fuego y la Rueda no podíamos haber llegado a una Era Agrícola. Ahora, de la agricultura fue de donde nació la escritura y la necesidad de asentarnos en un lugar dando origen a las ciudades.

Entonces, las ciudades surgieron por esa necesidad de transmitir ese conocimiento, de colaborar entre síPor eso siempre están ligadas Ciudad y Conocimiento.

A medida que fuimos avanzando en el tiempo nos fue más fácil producir y difundir contenidos. Primero tuvimos los papiros, luego escribimos libros pero esta información fue recolectada y muy custodiada, por eso desde el Renacimiento ya se decía que «El conocimiento es poder«.

Pero después con la invención de la imprenta ese conocimiento iba a comenzar a ser transmitido de forma masiva y va a permitir que los inventos posteriores se globalizaran. Pasamos por el telégrafo, que también podría considerarse una nueva tecnología en ese entonces, el fonógrafo, la radio, la televisión. Finalmente llegamos a la Era informática. Podría decirse que todas ellas son TIC, Tecnologías de la Información y Comunicación.

Llegamos a la Era digital, el Internet. Al fin las personas del común tuvieron acceso a la red. El uso de las redes P2P permite que los usuarios pasen de un papel pasivo consumidor de información, a un papel activo en la creación de contenidos porque se convierte en autor, colaborador y descentró la información, dando pie luego a la Web 2.0.

Si volvemos al gráfico de las capas, ya podemos poner la capa de la estructura de lo que ahora llamamos las nuevas TIC, para ver todas las capas que componen a una ciudad. Sigue estando la Estructura Verde, los ríos, las edificaciones, las vías, los servicios y las TIC que se sobreponen. Están sobre la misma ciudad, no como una realidad alterna a ella si no como parte de ella, y a partir de ahí es que podemos comenzar a hablar de Ciudades Inteligentes. Las ciudades en este punto NO son perfectas, aún tienen todos los problemas por resolver en todas las capas.

Con la llegada de los móviles inteligentes comenzamos a usar el término – que además es comercial – pero las Ciudades Inteligentes ya habían nacido, porque con la llegada de la Web 2.0 se comenzaron a dar procesos de auto-organización y coordinación ciudadana para realizar acciones sobre un espacio físico: La comunidad como plataforma.

La necesidad de compartir conocimiento siempre nos llevó a transformar las ciudades. De hecho las personas ya se habían estado trasladando a las ciudades en busca del conocimiento, o sea, ya estábamos comenzando a transformar ciudades: Mientras las ciudades crecían requerían más viviendas, mas infraestructura. Y ahora tenía el poder de hacerlo pero con nuevas herramientas y con mayor acceso al conocimiento, dando pie a la innovación y nuevos modelos de negocio.

Al principio los modelos de negocio se relacionaban con beneficiar directamente con el ciudadano: ejemplos como huertos ciudadanos, compartir el carro para hacer viajes para beneficiar al medio ambiente, ambientes de trabajo colaborativos como lo co-working, la llegada del crowdfunding, etc.

Fueron requiriendo más información sobre la gestión de las ciudades, la administración pública y a estar más involucrados con lo que se está haciendo en ellas, a requerir no solo palabras, si no acciones. Aunque la Participación Ciudadana podemos remontarla hasta la época de la Revolución Francesa, es un hecho que un ciudadano con acceso a la información, busca, investiga y exige acciones, y ya que el acceso a la información cada vez está mas globalizado, ha surgido el Gobierno Abierto y el Open Data como consecuencia a estas exigencias.

Comenzamos a generar una cantidad inimaginable de información alimentada por los ciudadanos. Por ejemplo, los mapeos que fueron levantados por los ciudadanos y nos dimos cuenta que esos mapas podían ser más eficaces que los de las grandes empresas, como en el caso de Map Kibera.

Pero estas  grandes empresas no se podían quedar atrás: ven que la generación de esta información puede ser un gran negocio. De hecho el término de Smart Cities es marca registrada de IBM en el 2011 y las demás no podían quedarse atrás. No hubo que esperar mucho para ver nacer alianzas público-privadas. Las grandes empresas privadas naturalmente van a buscar más su beneficio económico y que la inversión sea rentable. Entonces, ¿por cuál grupo de personas fue concebido el término de Smart City? Personas con todas las necesidades cubiertas. ¿Estarían desafiando la gestión, el manejo de las Estructuras?

Quien controle las ciudades, controlará el 70% de la población mundial hacia el 2050, tal vez antes. Teniendo esto en cuenta el ambiente de competencia aumenta: cuál es la ciudad más innovadora, cuál es la que más turistas atrae, cuál es la que más inversión atrae.

Regresemos al gráfico. Esta es la evolución occidental de una ciudad en un país desarrollado. Pero en los países en vía de desarrollo aún no tenemos estas estructuras funcionando y en muchas hasta hacen falta varias. Nuestro desarrollo tampoco es lineal y las fórmulas que le sirven a una ciudad no sirven a la otra.

Hablamos de los 7 pecados capitales de las Smart Cities, tema que hemos tocado en un post anterior.

Pero por cada desventaja hay una oportunidad.  Tenemos más que nunca el poder de mejorar la calidad de vida en las ciudades. Si algo hemos demostrado es que los ciudadanos siempre se abren paso.

¿Transformaremos el concepto que nació como una idea comercial, en algo con todo el potencial para revolucionar nuestras ciudades?

¿O debemos hablar de otros términos más sensibles con las personas y comenzar con estas ideas desde cero?

¿Cuáles crees que serían las oportunidades y retos para las Smart Cities?